Hemos convertido la gordura en una grave falta moral que solo se puede purgar a trave´s del sufrimiento intenso. Atrapados por la cultura de la dieta, nos animamos unos a otros a machacarnos a trave´s de restricciones alimentarias que derivan en trastornos mentales, enfermedades físicas y tambie´n aumentos de pes o cíclicos. La gordofobia y la cultura de la dieta se han instalado en nuestra mente, nuestra moralidad y nuestra manera de estar en el mundo sin que ni siquiera seamos conscientes de ello. Solo al pararnos a pensar podremos empezar a derruir un sistema de creencias que nos ha dan~ado a todos.