Qanik y sus hermanos tienen un percance en la nieve y los esquís del pequeño son los únicos que no se rompen. Sin embargo, Qanik no quiere prestárselos a su hermano mayor para que vaya a pedir ayuda. ¡Los esquís son suyos! ¡Solo suyos!
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Puede obtener más información aquí o cambiar la configuración.