Carapuntada ha decidido abandonar las sombras y aventurarse a vivir su casi-vida. Además, los huérfanos que
	rescataron y que ahora habitan en el castillo Grotescote desde hace una semana tienen tanta hambre que están empezando
	a rebelarse. Como en el castillo no hay comida, Carapuntada y su amiga Arabella bajan al pueblo para ver qué pueden
	encontrar, pero resulta que se dan de bruces... ¡con una fiera aterradora! ¿¡Se habrá escapado del castillo una de las
	creaciones del profesor Erasmus!?